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Guía de cuidados
Cómo cuidar
de tus jerseys
Un prenda de punto bien cuidada realza tus capas de abrigo a lo largo de los años. Nuestra guía te conduce a través de los cuidados básicos que merece un jersey de lujosa calidad.
Mantenimiento
Cepillar suavemente— Adquiere un cepillo suave para ropa y frota tu prenda de punto hacia abajo regularmente para eliminar pelos y excesos de pelusa.
Cuidados básicos
A la hora de eliminar olores leves, menos es más. Deja la prenda en el exterior, en un área fresca y ventilada, o cuélgala para que reciba el suave vapor de una ducha caliente. Te sorprenderá cómo se refresca este tipo de tejidos con solo dejarlos respirar.
La formación de pelusa se produce a medida que el tejido roza contra sí mismo a lo largo del tiempo. Puedes eliminar esas pequeñas bolitas con una afeitadora especial para telas. Los tejidos más finos, como el cachemir, deben peinarse en lugar de afeitarse. Para ello, extiende la prenda y peina el tejido en una única dirección, con un movimiento suave y continuo.
Entre uso y uso, siempre puedes limpiar tus prendas cepillándolas a lo largo. Así eliminarás el polvo y la suciedad que opacan la apariencia del tejido, y que luego pueden convertirse en manchas.
Limpieza
Lavado a mano — Las fibras como el puro cachemir se lavan mejor a mano. Deja la prenda en remojo 10 minutos como máximo, luego enjuágala meticulosamente con agua limpia.
Menos lavado, más uso
Lavar menos tus prendas de punto ralentiza el desteñido y mantiene la calidad del tejido por más tiempo.
La mayoría de nuestros tejidos de punto, como la lana o el algodón, son aptos para lavadoras con programa delicado. Para preservar mejor el color y evitar el desteñido, procura lavar juntas las prendas de colores similares , utilizando un producto suave. Ante la duda, consulta siempre la etiqueta con las instrucciones de cuidado.
Otras fibras, como el puro cachemir, se lavan mejor a mano. Para eso, llena el fregadero con agua fría, añade algún jabón suave y lava ligeramente. Evita restregar y frotar con fuerza, pues eso provoca el desgaste de la superficie y la formación de pelusa. Más bien empapa ligeramente la prenda y gírala despacio. Enjuaga con agua limpia antes de secar.
Secado
Secar extendido
Como sucede con todos los tejidos, siempre es preferible el secado al aire libre. Las prendas de punto húmedas pueden volverse pesadas, así que evita colgarlas. Colocarlas en forma plana permitirá evitar que, con el tiempo, el tejido se hunda, deforme o estire a raíz de la fuerza de gravedad.
Para secar prendas lavadas a mano, estrújalas suavemente para quitarles la mayor cantidad de agua posible, procurando no retorcerlas ni escurrirlas demasiado. A continuación, extiéndelas sobre una toalla seca y enróllalas durante unos minutos, tras lo cual puedes colocarlas sobre un tendedero de alambre o una superficie llana para terminar el secado en el exterior. Recuerda nunca poner una prenda de lana fina en la secadora.
Guardado
Evitar la humedad — Para mayor protección, recomendamos colocar algunas bolas de cedro antipolillas en tu cajón.
La forma correcta de guardar tus jerseys
Si ordenas las prendas como corresponde, impedirás que estas se desgasten o se rasguen. Olvida las perchas y opta por un pliegue prolijo dentro de un cajón especial. Siempre asegúrate de que los jerseys estén completamente secos antes de guardarlos para evitar el olor a moho y el consecuente deterioro del tejido que provoca la humedad. Para mayor protección, te recomendamos colocar en tu cajón algunas bolas de cedro antipolillas de buena calidad.
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